La Voluntad.
Bueno ya tenemos nuestra lista de
cosas por hacer este año y/o en esta vida, y ahora que sigue? Desde luego no
basta con tenerlas redactas y pensar que algún día se convertirán en realidad,
eso no va a suceder aun y cuando le prendas una veladora a un santo de tu
devoción o pongas a San Pedro de cabeza o le pidas el milagrito a San Judas
Tadeo, claro te puede ayudar pero no lo es todo, ya lo dijo Dios, ayúdate que
yo te ayudaré! Así que no dejemos las cosas a la buena fe, hay que actuar, hay
que ejecutar y para eso, se necesita algo que debe nacer de nosotros mismos,
falta ese algo que nos mueve a hacer las cosas con una intención, es ese poder
de elección que ayuda a nuestra consciencia, aunque existe el libre albedrio
que consiste en elegir y tomar nuestras
propias decisiones pero es algo así como ese pequeño o gran empujoncito que nos
mueve a actuar, a hacer y poner manos a la obra y que tiene que ver con nuestro
actuar, con nuestra conducta, y me refiero precisamente a la “voluntad”.
Voluntad, sin más ni más, es eso
que nos mueve a hacer algo con una intención, es decir, la voluntad es aquello
que nos lleva a lograr objetivos planeados, ya sea porque tenemos la motivación
y convencimiento para lograrlos o bien porque estamos conscientes que debemos
llevarlos a cabo.
Salir a correr siempre es una cuestión
que pasa por nuestra mente, sobre todo cuando es muy temprano, cuando hace
frío, cuando hace calor, cuando llueve o incluso, para aquellos en climas más
extremos cuando hay nieve, el diablillo hace gala y nos cuestiona, retándonos a
esos 5 minutos más de sueño, a sacar el pretexto para no salir, a poner la
objeción antes de la acción, te pones a
pensar si salir o no salir, y ahí, es precisamente donde sucede todo, la
incertidumbre se apodera de la buena causa y la mayoría de las veces gana el
permanecer en la zona de confort, hace frío, para que salgo, hace calor, que
pesado, hay mucha humedad, voy a sudar como loco, está lloviendo, me voy a
mojar, mejor mas tarde, mejor en la noche o mejor a mañana…. y así se pasan los
días hasta que a veces el remordimiento nos toma por rehenes y nos presiona a
actuar, ese es el gran reto, lo que debemos hacer es no pensar, simplemente
actuar, lo mejor es estar programados, desde un día antes hay que tener en
mente la hora a la que hay que entrar en acción, la programación neurolingüística
funciona, solo es cuestión de decisión y decir, mañana me voy a levantar a las
6 AM y voy a salir a correr, si usas despertador o no, solo realiza la acción,
abre tus ojos, y antes de pensar en otra cosa dite ya es hora, levántate y haz
lo que debes hacer, si te pones a pensar o a sacar conclusiones, el diablillo
se apoderada de ti y te invitará con cualquier clase de pretexto para no salir,
es en serio, solo levántate y anda, como lo hizo Lázaro.
Otra parte muy importante es que
debemos tener un plan para llevarlo a cabo, si tienes un programa o una carrera
ya inscrito, será mucho más probable que te apliques, cuando no hay un reto,
una meta u objetivo de por medio, es más fácil dejarte llevar por el diablillo,
te convencerá muy fácil, pero por lo contrario, si ya sabes para dónde vas, si
ya tienes tu bucket list, y estas mentalizado para cumplirla, tu consciente
trabajará en ese sentido, los pretextos no serán una opción, debes tener tu
mapa mental muy claro y definido, muchas veces el no tener rumbo es lo que nos
hace participes de la inconstancia, puede ser que se atraviesen compromisos
laborales o sociales y habrá que modificar el plan o la secuencia, pero seguir adelante
y sobre todo estar consciente del objetivo hará que pongas manos a la obra, o
pies a la tierra con todo y tenis.
Muchos atletas están altamente
motivados por lograr ciertos objetivos, no importa si el tuyo es para un record
mundial o personal, simplemente no te distraigas, piensa siempre en el objetivo
final, y cada vez que salgas a cumplir piensa bien y mentalízate en la parte
que te toca hacer, recuerdo una vez que un consultor de origen estadounidense
me comentó que había que había corrido en la banda o caminadora esa mañana, y
me dijo: hoy corrí lo que nunca había corrido, estaba muy contento, le pregunté
y como lo hiciste? Me dijo me propuse un tiempo, lo completé y me sentía muy
bien, dije voy a seguir 5 minutos más, los cumplí y me sentía muy bien, después
me propuse otros 5 minutos y los volví a completar, continué con otros 5 y al
final, me di cuenta que había corrido 50% más de mi objetivo inicial, lo mejor
de esto es que me di cuenta que si me hubiera puesto la meta de correr 45
minutos desde el inicio, quizá no los hubiera hecho porque no estaba consciente
que los podía hacer…
El aprendizaje de esta historia
es que si te pones metas cortas las puedes lograr fácilmente porque no tienes
grabado el mapa mental de que un reto mayor es más difícil o que no estás
preparado para hacerlo, la realidad es que tu mente no te permite hacerlo
porque no lo tienes conscientemente mentalizado porque no te crees capaz de
realizarlo, pero si vas poco a poco, con metas cortas pero constantes lograrás
lo que no te imaginas.
Ayer, después de una carrera de
10K escuché a alguien muy emocionado que
le decía a otra persona: si no te atreves a hacerlo, nunca te vas a dar cuenta
de lo que eres capaz de hacer, por eso inscribirte a la carrera te obliga a
retarte, Ya ves la pudiste hacer!
Esas palabras se quedaron en mi
mente y solo me dije a mis adentros, ya rompieron su paradigma y dentro de poco
estarán corriendo un maratón porque cambiaron su mapa mental.
Recuerda, Roma no se hizo en un
día, la perseverancia y la constancia son parte importante cuando la voluntad
nace y nos hace perseguir ese sueño.
Este fin de semana, me encotré a una persona participando en un 3K, yo corría el 10K y la vi cerca de la meta, iba en una andadera y a su paso como podía arratsraba un pie y luego el otro, la vi sudando pero muy comprometida con lograr su reto, al rededor algunos la animábamos, que mas voluntad que ponerse en movimiento y lograr el reto, al final la vi en la meta, la salude y la felicité por esa gran voluntad de cumplir ese reto, un ejemplo para todos.