Alicia, Claudia,
Marisol, Nora, Gaby, hola a todas: el día de mañana será una gran día para
ustedes y quiero felicitarlas por esa decisión que tomaron, correr un maratón
no es cualquier cosa, pero es una experiencia de vida que nos transforma, desde
la emoción y nervios previos al arranque, la adrenalina que recorre el cuerpo,
el miedo que nos invade y que se disipa al escuchar el disparo de salida; en ese momento ya no hay marcha atrás, lo que
hayan hecho o dejado de hacer ya no importa, solo importa el entusiasmo y esas férreas
ganas de cumplir el compromiso, de cumplirse
a sí mismas; disfrutar el recorrido es esencial para dejar atrás el estrés de
la carrera, experimentar la sensación del viento, del frío, quizá de la
llovizna las hará disfrutar y experienciar precisamente esa libertad que se genera al dar un paso tras otro mientras que por la mente pasaran muchas cosas, pensar en todo
y en nada, escuchar las porras de aliento de la gente incrementa ese
nivel de sensación y entusiasmo, estar atentas a observar cualquier detalle que
son los pequeños o grandes aderezos que le dan sabor y entusiasmo al evento, hay
pensar en positivo y olvidar lo negativo, no será fácil, nadie ha dicho que sea
fácil, los dolores acarrean
pensamientos, pero la fortaleza que llevan dentro detonará la energía que las seguirá
impulsando a continuar, a seguir a pesar de pesares, esa energía, ese impulso que
sale del corazón cuando las piernas dicen ya no más, entonces ahí es cuando se
enfrentaran al verdadero reto, a vencer esos miedos, ese cansancio, ese
agotamiento, ahí es cuando inicia el maratón, el trabajo físico ya está hecho,
ahora sigue el trabajo del alma, y a esa alma, a esa voluntad nadie la puede
detener, ahí es cuando se corre con el corazón, esa es la actitud correcta. La
meta será la culminación del logro, ahí estarán las mejores emociones
esperándolas, háganlas suyas y disfrútenlas.
Enhorabuena y
todo el éxito que está por venir! Como
dicen por ahí, pasado pisado, presente de frente, Animo!