Semana 1
Peso Inicial: 79.1 Kg
Distancia de la Semana: 29 Km
La semana transcurrió, el
entrenamiento también, pero las condiciones fueron diferentes. El domingo
pasado, Alicia y yo participamos en un 10K, había decidido hacer todo el
recorrido al lado de ella, desde el inicio hasta el final. Minutos antes del
arranque nos tomamos algunas fotos, platicamos de diversas situaciones y ya
próximos al arranque nos perfilamos a la línea de salida, después de algunas oraciones
y bendiciones de los prelados y jerarcas de la Iglesia (era el 10K del Diezmo)
sonó el disparo de salida, los nervios clásicos estaban presentes, arranqué
todavía subiendo algunas imágenes a la
red y tras unos metros Alicia me llamó la atención, me dijo: Ya deja eso, te
vas a caer! Solo reí y guardé el teléfono, ni modo, soy mandilón, que le voy a
hacer.
Continuamos el recorrido inicial
y vi que íbamos a un ritmo de 5:40 min/km, le pregunté: Flaca, a esta velocidad
corres? Solo me volteó a ver y me obsequió una sonrisa, pero yo insistí: estás
segura? Vamos muy rápido, no te vayas a quemar, seguía insistiendo, pero como
que no hubo mucho eco, poco a poco disminuimos la velocidad con el primer paso
a desnivel y Alicia fue agarrando su ritmo, su propio paso, ella me insistía
que me adelantara, me dijo ándale, dale, no me voy a rajar! Le dije, eso me
queda muy claro, pero no, te dije que iba a correr toda la carrera junto a ti.
Disfrutamos el recorrido,
realmente fue una carrera muy animada, había muchos puntos con voluntarios
echando porras y algunos con música, fue una carrera muy agradable, la humedad
estaba presente, el sol, hizo su aparición y dejo sentir su energía. Ya después
del km 8 llevábamos un paso de 6:20 a 6:40 min/km, y aproximadamente 51 min de
recorrido, pensé que manteniendo el ritmo, terminaríamos más o menos en 1:05
hrs. el arranque rápido ya estaba haciendo su mella en Alicia, el último paso a
desnivel lo subimos a 7:10 min/km, continuamos sobre Av. Constitución, dimos
vuelta en Dr. Coss y ahí estaba la meta, nos tomaron foto, veníamos felices y
satisfechos por una buena carrera, plática y desde luego compañía y aún más con
el tiempo del recorrido, 1:04:35 hrs, Alicia terminó en 10º lugar de su
categoría, nada mal para ser su segundo 10K a pesar que cayó en el aprendizaje
de todo buen novato, se dejó llevar por la emoción del arranque, le ganó el
entusiasmo y arrancó muy rápido, a pesar que llevaba freno de mano el cual
ignoró pero después del km 8 me dio la razón. Llegamos muy felices a la meta y
desde luego que de la mano y con los brazos arriba. Esta carrera fue el perfecto
marco del inicio del entrenamiento del maratón que oficialmente arrancó el
martes posterior a esta carrera.
Esta semana estuve en la Ciudad
de México, el martes me levanté temprano y me salía a correr para dar inicio a
la primer sesión, salí por la calle de Florencia e inicié el recorrido, di
vuelta sobre Av. Reforma hacia el Bosque de Chapultepec, el Angel de la
Independencia una vez más me vio pasar a su lado, aún oscuro, mas sobre el
camellón donde hay abundantes y frondosos arboles que adornan a esta avenida y
embellecen su vista.
Minutos después llegué a la no
menos célebre estela de luz, pero no tenía luz, esta exactamente en la entrada
al Bosque de Chapultepec, la única luz que había era de la hermosa brillantes
de la luna llena que iluminaba las penumbras con su resplandor. Las puertas del Bosque ya estaban abiertas,
ingresé sin más ni más, el monumento a los Héroes lucía majestuoso e iluminado
por la luna que se encontraba en el horizonte junto al Castillo de Chapultepec,
nuevamente venían a mi mente recuerdos varios, alguna ráfaga de viento fresco
se llevó esos pensamientos al sentir como penetraba por mi playera y en la humedad del sudor se sentía como
alfileres en mi cuerpo.
Continué por el circuito que
rodea al Castillo de Chapultepec, ya habían varios corredores, me fui rumbo al
lago hasta que mi reloj marcó la mitad de la distancia a recorrer y el punto
donde debía dar retorno, ahora todos los corredores venían en contra mía, yo
los veía en pants, sudaderas, algunos con guantes y gorros invernales, ellos me
veían como bicho raro, en shorts y playera de manga corta, quizá el hecho de
que sea Bosque les invitaba a cubrirse más, pero el frío es algo que puedo
soportar cuando estoy en actividad, creo
que después del pasado maratón donde la temperatura jamás rebasó los 9 grados
centígrados y la llovizna presente en casi en los 42 km hizo que ya estuviera
curado de espantos pues después de la llegada a la meta estuve a nada de una
hipotermia, pero en fin, para mi resulta más cómodo correr con una temperatura
fresca y que no sea necesario cubrirme con algo más que una playera, de
cualquier manera, fui blanco de las miradas fruncidas de varios corredor@s.
Ya de regreso y saliendo del
Bosque, la luz se hacía presente, el amanecer dejaba ver como las actividades
del día a día comenzaban por doquier, era el despertar del gigante, de la gran
Metrópoli, retorné hasta mi punto de partida y me fui en busca de un puesto de
jugos que un día antes había ubicado, sin embargo, al llegar a la esquina vi
con tristeza que no estaba, ni hablar, me fui directo al hotel.
Al día siguiente, es decir,
miércoles, salí un poco más temprano, estaba más fresco que el día anterior,
hice el mismo recorrido, solo que al llegar a la entrada el Bosque junto a la
estela de luz, noté que aún no estaban abiertas las puertas, ya me había pasado
en otra ocasión, a pesar que hay un letreo que dice que el horario de apertura
es a las 5 AM seguía cerrado, eran las 6:15 AM y aún no se veía a nadie alrededor con intensiones
de abrir, continué trotando alrededor de la estela para no detenerme, sin
embargo, el tiempo pasaba y nada que abrían.
Es el colmo, puedo entender un retraso de 5, 10, 15 minutos pero más de
una hora es inadmisible, llegaron algunas otras personas, unas esperaban, otras
se iban. En fin, me retorné por Reforma hasta Sevilla y regresé y aún no
abrían, me molestó pero dije, bueno por algo sucede, di media vuelta y me
regresé por todo Reforma hasta Av. Insurgentes donde volvía a retornar hasta el
Angel. En rojo esta indicado el recorrido.
La noche del lunes, después de
cenar un café con leche y un bisquet con mantequilla y mermelada de fresa en
los Bisquets de Obregón, fui a un Sanborns con la intensión de comprar un
libro, al no encontrar el que buscaba saltaron a mi vista varias opciones del
joven Jorge Bucay, pero no elegí ninguno de ellos, opté por otro autor.
El asunto es que el miércoles ya
de regreso en el trote sobre Av. Reforma venía disfrutando de lo que veía a mi
alrededor, los periodiqueros armando sus exhibidores, la del puesto de tamales
poniendo su anafre para la olla de los tamales, el barrendero ejecutando su
danza con un va y ven a ritmo de danzón con su pareja la escoba que me hizo
recordar a Cantinflas, y así muchos otros que iniciaban el día con su actividad
comercial y ganarse el sustento del día, pensaba yo, este es el despertar del
gigante, basta poner atención a esos pequeños detalles para ver y agradecer la
oportunidad, venía pensando en todo esto y me sentía feliz por poder disfrutar
esos momentos cuando el locutor de la
estación que venía escuchando comenzó a leer un cuento de Jorge Bucay que se
llama “El Buscador” de su libro “Cuentos para Pensar”.
Así, mi atención se volvió total
al locutor quien le daba una entonación digna de orador que logra transmitir
todo el sentimiento, no voy a poner todo el cuento pero solo mencionaré la
parte final que hizo click en mi, sobretodo, por la sincronía con que se dio,
por una lado yo disfrutando de ese momento y por otro, la lectura que vino a
reafirmar eso que yo estaba viviendo. Eso es Sincronicidad, nada es casualidad
ni coincidencia.
El Joven Bucay, finaliza
el cuento en palabras más o menos así:
Hay
que sumar el tiempo de lo disfrutado en la vida, porque Ese es, realmente el
único y verdadero tiempo VIVIDO….
Aquí les dejo un link si quieren
escuchar un audio del cuento:
Ese miércoles fue realmente
inspirador, a pesar de la mala pasada de que el Bosque estaba cerrado, disfruté
ver ese despertar del gigante adornado con la cereza del cuento, pero no todos
los días son así, también hay la contra parte.
Ya estando regreso en MTY la tarde
del viernes salí a realizar mi tarea, esta vez haría bicicleta con transición a
trote, después de haber rodado mi sesión, me puse los tenis para correr e
inicié el trote, las piernas aún estaban
acostumbrándose al pavimento y olvidando los pedales, pero otra mala
jugada se hizo presente, mi aparato digestivo se activó y comenzó a solicitar
permiso de una escala técnica, realmente fue muy insistente y ante la
imposibilidad de continuar, tuve que suspender el trote, no llevaba ni 400
metros, estaba molesto por la situación y aun tenía 5K por correr, ni hablar,
no siempre se puede, es muy incomodo tener esa presión así que me fui a casa ya
que no me gustan los lugares públicos para desahogar mis penas.
Ya una vez en casa y después de
bajar la bici del carro y todo el equipo, hice lo propio, pero aún no me
resignaba a no cumplir con el plan, así que una vez liberado el estrés, salí a
correr al acostumbrado parque, por ahí, algunos PANISTAS estaban haciendo
campaña, quise ir a escuchar lo que decían, pero primero debía cumplir conmigo
mismo, corrí tranquilo pero sofocado por el calor, quedé más seco que un pino
navideño en vísperas del día de la candelaria pero contento de haber cumplido
con el programa, esos son los retos, esas son las piedritas que se aparecen en
el camino pero hay que buscar la forma de darles la vuelta y seguir adelante
para cumplir con el plan.
Este domingo me correspondió la
sesión larga, debía correr al menos 12 Km, así que aprovechando que había un
10K del Casino del Valle, llegué con anticipación e inicié el trote casi 15
minutos antes del disparo de salida, justo venía de regreso cuando vi que
arrancaron, seguí hasta el final y me incorporé a la carrera, portaba numero y
playera oficial del evento pero como se trata de entrenamiento, no me precipité
por lograr un tiempo y o romper mi record, simple corrí manteniendo el paso, el
calor era bochornoso, ya después del km 5, apresuré el paso y lo mantuve durante casi 2.5 km, prácticamente
era subida, dimos vuelta de retorno en San Agustín y de ahí hasta la meta.
Acabé realmente escurriendo, la temperatura rondaba ya los 29 o 30 grados
centígrados, fue algo agotador pero termine la sesión con un total de 12.7 Km,
así fue la primer semana del entrenamiento.
MUY BIEN, FELICIDADES RAUL Y ESPERO QUE ME ACOMPAÑES PRIMERO A UN 5K PARA ASI PODER PONERME COMO RETO UN SPRINT JEJE, SALUDOS
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