Semana 15

Semana 15

Distancia de la semana: 66 km

Distancia acumulada:  583 km

Peso actual:  77.6 kg (por fin se notó).

Semana pico del entrenamiento, esta semana con Grito de Independencia fue la semana con mayor kilometraje de todas, este fin de semana,  45,000 corredores en diferentes latitudes y altitudes debimos haber corrido de 28 a 36 km, según el programa de cada de quien, el mío fue de 32 km, al igual que Gustavo y Sergio, Mike, si no mal recuerdo su programa es diferente y está basado más en desarrollar fuerza que distancia, el hecho es que este fin de semana se alcanzó la cumbre y las tres semana que están por venir son de recuperación, el kilometraje va en descenso y con él la recuperación de los músculos, el cuerpo ya está preparado en cuanto a resistencia y fuerza y aquellos que van por romper su record, ya también habrán trabajado en desarrollar velocidad, son las tres características que se contemplan en un entrenamiento para maratón:  Resistencia, fuerza y velocidad.

Esta semana también fue de viaje, estuve en el DF donde hice dos sesiones, una de 16K y al día siguiente 9K, en esta ocasión partí del centro histórico, la primera, saliendo por una calle renovada y cerrada al tránsito vehicular convirtiéndose en un concurrido paso peatonal, inicié a las 5:30 AM, aún estaba oscuro, la temperatura era de aproximadamente 16 grados centígrados, fresco pero nada que preocuparse, arranqué justo a una calle del zócalo rumbo al Eje Central, la calle estaba sumamente iluminada, todos los edificios del primer cuadro son  dignos de observar detalladamente, de la época de la colonia, así que venía poniendo atención, especialmente al palacio de Iturbide que actualmente pertenece al patrimonio cultural de Banamex y en donde es común que realicen exposiciones, realmente recorrer el centro histórico y conocer sus edificios requiere de tiempo pero sobre todo del gusto de poder disfrutar esas obras arquitectónicas, en fin, pronto llegué a la esquina donde se ubica la torre latinoamericana, contra esquina de otro bello edificio que es el palacio de las Bellas Artes, donde ese día velaban a un famoso escritor que recién había sido llamado a rendir cuentas, la sorpresa fue que cruzando a la Alameda, toda la iluminación era muy diferente, más oscura que alumbrada y además zona de reparación, así que había que poner atención para no dar un mal paso, sin embargo, todo está quedando muy bien y digno de una ciudad de primer mundo, aunque aún deben poner más atención en la iluminación del resto de las calles que es muy pobre.

Pronto llegué a la esquina de la información, justo ahí en Bucareli, donde el bullicio de los repartidores de periódicos que se disponían a cargar sus bicis, motos y camionetas con las noticias aún “calientes” de las prensas, entre platicas, comentarios chuscos y los clásicos albures avance con una que otra risa por lo que alcanzaba a escuchar a mi paso. Así, se comenzaba a manifestar el despertar del gigante.

Continué por todo avenida Paseo de la Reforma, poca gente, pocos vehículos pero algunos comercios ya comenzaban a prepararse para recibir a su clientela, especialmente aquellos del ramo alimenticio. Continué avanzando, pronto llegué al Angel de la Independencia que hoy 16 de septiembre se viste de gala, luego la Diana Cazadora y unos pasos después la cuestionada estela de luz, para mi sorpresa, apenas pasaba de las 6 AM y la puerta de entrada al Bosque de Chapultepec ya estaba abierta, me dio gusto pues en el pasado a esas horas me había tocado que aún estaba cerrada.

El Bosque también necesita iluminación, está sumamente oscuro, aún así me adentré en sus entrañas y vi que ya habían varios corredores y ciclistas merodeando por ahí, pasé el monumento a los héroes y tome el circuito que rodea al castillo de Chapultepec, le di dos vueltas y tomé la salida nuevamente a Reforma por la estela de luz y continuar por donde había llegado.

Cada vez se notaba mas la actividad de la ciudad, durante todo el recorrido llegaban a mi aromas varios,  algunos me traían recuerdos, otros inspiraban antojos, otros prefería apresurar el paso para dejarlos atrás.

Llevo un poco mas de 15 años fuera de la gran Metrópoli, y para mi sigue siendo una gran ciudad, lamento su tráfico que fue el motivo principal que me llevo a tomar la decisión de salirme pero no cabe duda que es una chulada de ciudad.

Continué mi camino de regreso, y la luz del astro rey poco a poco comenzó a asomarse, así, llegué a mi destino completando la distancia objetivo, terminé muy bien y la altura no cobró su factura, cosa contraria que sucedió al día siguiente cuando inicie el trote y mi corazón se encontraba algo agitado pero después de unos minutos se estabilizó. 

Esta vez tomé una ruta diferente y recorrí algunas otras avenidas, incluyendo una vuelta a todo el zócalo donde ya comenzaban a armar escenarios, gradas y demás infraestructura para el último grito de Felipe, a los del SME ya los habían desalojado y comenzaban a limpiar el mugrero que habían dejado.

Ese mañana fue un poco más fresca que la anterior, la lluvia había traído esa frío matinal, así corrí muy a gusto, recuerdo que terminé y entré a una tienda de conveniencia por una bebida hidratante, la tienda está abierta era un local abierto, sin puertas, tome mi bebida y me serví un café, di media vuelta y estaba la cajera sumamente abrigada y temblando, le dije: tiene frío? Me dijo si, y de verlo con su shortcito me da más frío, jajaja, le dije pues salgase a correr y se le quita, se sonrió y me dijo pues sí, verdad?

En fin, fue un entrenamiento de altura que sin duda me benefició, correr en la ciudad de México es diferente y los disfruto, buena temperatura, mucho que observar alrededor, los aromas y las actividades de inicio del día, diría Luis Miguel: así se vive México, así se siente México en la piel….

El viernes Sergio corrió sus 32K, previo estuvimos comentando varios puntos y su sesión fue satisfactoria, mejoró su tiempo y se sintió muy bien, completó la distancia sin mayor problema aunque luego me dijo, no sé de donde me van a salir fuerza para correr otros 10K mas. A lo que le comenté que salían porque salían, además que ahora ya traemos cansancio y desgaste acumulado, y que por eso venía la parte de la recuperación, para llegar enteros a la maratón, y que la energía de la gente que corre y las porras del publico hacen lo suyo a lo que me comentó: si, y además que mis hijos han visto todo el proceso del entrenamiento y saber que me estarán esperando en la meta, pues como no llegar!! Me dio gusto lo que dijo, la motivación es importante y el ya la tiene muy presente así como  el motivo por el cual llegar, todo está como debe estar, así o más claro?

El recorrido de Sergio de los 32K

Este domingo hice mi sesión de los 32K, esta vez no incluí participación en ninguna carrera, me preparé con la hidratación suficiente y equipo necesario, había estado lloviendo así que incluí un impermeable por si las moscas.

Llegue a conocido estacionamiento en calzada del Valle y estaba lloviznando, dije, bueno tendré sacar el impermeable, vi muchos corredores con paso apresurado pero inmunes a la lluvia, estaba comentando con Sergio de la lluvia y me preguntó: y que vas a hacer? Solo le respondí pues correr!! Jajajajaja no había otra opción en  mi mente.

Me bajé del carro, me puse el impermeable, estiré un poco y comencé el trote, me propuse hacer la técnica 14-1, había mucha gente corriendo, ya cerca de Humberto Lobo me encontré a Gustavo, nos saludamos, me di media vuelta  y trotamos juntos, el ya llevaba algunos kilómetros, había iniciado a las 6 AM, llegó temprano, yo apenas tenía unos minutos, me dice: te desvelaste? Le dije no, simplemente quería llegar bien descansado, no le comenté pero la realidad es que a las 9 PM del día anterior ya estaba en la cama dispuesto a dormir. Nos fuimos comentamos aspectos varios, me pregunto vas a correr hasta Vasconcelos, no se aún, y tu? Le pregunté, me respondió que no, que solo ahí en calzada,  pronto estábamos llegando Gomez Morin me dice me toca caminar, te veo al rato, ok le respondí.

Continué mi marcha y vi unas personas que iban hacia Vasconcelos, dije pues correr en círculos me aburre y me desespero, correr en otras ciudades y meterme por calles y avenidas que no conozco me funciona bien porque me olvido de lo que me falta, así que dije, a donde me lleven mis pasos, continué y pronto llegué a San Agustín, subí hasta Fundadores y dije unas buenas pendientes me pueden ayudar, a pesar de la lluvia que pronto se disipó ya estando en Valle Ote., había mucho más gente corriendo, me despojé del impermeable pero ya estaba todo mojado por el sudor, estábamos a 21º Celsius, pero la lluvia ayudó mucho, me sentía muy bien, la pendientes no las sentí, definitivamente correr a 2240 metros sobre el nivel del mar, me tuvo que haber ayudado, me sentía muy fuerte y literalmente me venía comiendo el pavimento, seguí hasta el final y di vuelta en U en paseo residencial, y otra vez, una buena tanda de subidas y bajadas, iba inspirado, ver el cerro junto a mí, las nubes bajas y el viento refrescando mi húmedo cuerpo me motivaba, simplemente venia disfrutando y daba gracias por esos momentos, curiosamente mi sesión más larga y que supone el mayor desgaste era la que estaba disfrutando mas en ese momento, me sentía tranquilo y en paz conmigo mismo, creo que eso fue lo mejor.

En algún momento me dio alcance una persona que salude, era definitivamente mayor que yo, cruzamos algunas palabras, el iba por 18K, estaba entrenando para la maratón de MTY, me dice vas hasta Humberto Lobo? Le dije si, pero ahí te alcanzo porque no creo aguantar tu paso, solo se sonrió y me dijo, no hombre, ahí nos vamos, le dije voy despacio, es mi última larga, voy por 32 y solo me responde, no! La última larga es de 36….  nos despedimos y poco a poco se fue alejando.

La línea Verde es la altitud y el recorrido abajo

Ya otra vez en Calzada, me encontré a Gustavo, nos saludamos y me pregunta cuánto te falta? Le dije llevo 23, me faltan 9, me dice, ya voy a terminar, ok le dije, nos despedimos.

Ya por el 28 sentía las piernas cansadas y me comenzaban a doler, el cansancio hizo gala y dije, ya me están pasando la factura de las subidas, me falta energía, así que eché mano de un mini Snicker recordando la sugerencia de Sergio, dije aquí es cuando, me lo comí y me lo bajé con un poco de agua, pero al rato lo estuve repitiendo, pero me dio energía y avancé sin mayor problema.

Al momento que escribo, tengo cero dolores de pierna, es método Osler funciona, se invierte tiempo en el cronometro, pero las molestias son mínimas. Ya me gustó.

El entrenamiento básicamente esta hecho, solo hay que concluir con la recuperación y  mentalizarse positivamente.   Felices fiestas patrias!